Una Nueva Vida

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Hoy ha nacido el hijo de uno de mis compañeros de trabajo. No uno cualquiera, sino uno de mi equipo.

Segundo niño. Marcos y Mateo. Aunque su mujer habría preferido una María Magdalena...
Lo más gracioso de todo, es que a pesar de los nombres, el primero ni está, ni va a estar bautizado...
No voy a poner fotos del niño, porque el tema está muy susceptible, pero os podéis imaginar a un niño rubito con rizos, mono de los de verdad, no de los de compromiso.

Pues eso.
Una cesárea, y todo bien. Tras un susto inicial, ya que parece que no respiraba bien, un par de horas en la incubadora han bastado para determinar que era una falsa alarma.

jeje... La primera impresión es que han salido iguales. Es decir, querubines, físicamente a la madre, por suerte para ellos, y rollistas como el padre...
Rollista pero de los buenos, eh??.
Recordemos que hay varios tipos de rollistas:

1. Los que acaparan la conversación y no te dejan hablar
   
2. Los que acaparan la conversación y están esperando que hables porque les interesa lo que tienes que decir.

(También está el tipo que acapara la conversación y te deja hablar cuando traga saliva, pero no le interesa lo más mínimo lo que tengas que decir.)

En fin.
Muchas historias paternales nos esperan en los futuros desayunos...